
Al pensar en términos de weird fiction, se nos remite, al menos en principio, a la producción de H. P. Lovecraft. En su ya clásico «El horror sobrenatural en la literatura» (1927), sistematiza y sienta las bases del weird tale o relato de ficción extraña 1, además de trazar una genealogía de las diferentes obras y escritores que pueden considerarse como integrantes de esta categoría. Los orígenes también se remiten a Weird Tales 2, revista pulp fundada en 1923 y que durante la primera mitad del siglo dio un lugar para publicar y discutir a grandes autores estadounidenses que incursionaron en el weird –u otros tipos de ficción especulativa; la ciencia ficción, por ejemplo–. Este fue el caso del propio H. P. Lovecraft, Clark Ashton Smith, Robert Bloch, Ray Bradbury o Fritz Leiber, entre otros.

El weird, como todo tipo literario, puede tener una presencia mayor o menor dependiendo de la obra. Las hay deliberadamente weird, pero en otras ocasiones la cosa no está tan clara: deben identificarse determinados elementos, a veces sutiles, que indiquen la presencia de esta cualidad, denominada con frecuencia weirdness. ¿Cuáles, entonces, son estos elementos y mecanismos? Es importante volver a la ensayística lovecraftiana para precisarlos. En primer lugar, es necesaria la presencia de un elemento sobrenatural sobre el que gira toda la producción. Hay que hacer énfasis en esta última parte: por sobre los demás mecanismos que se ponen en juego durante un relato weird, prevalece la disposición de una atmósfera adecuada para el desarrollo del fenómeno sobrenatural, con el objetivo de provocar un efecto de horror. Incluso los personajes deben actuar en un segundo plano, sin mayor importancia que continuar con la trama y propiciar este efecto, con frecuencia desde la identificación. Con el paso del tiempo, estas «condiciones» para considerar –o no– un relato como weird se fueron precisando, gracias a los estudios finiseculares de scholars estadounidenses como S. T. Joshi, D. Schweitzer, D. Burleson y D. E. Schultz.
Al considerar actualmente la cantidad de estudios críticos realizados en las últimas tres décadas, quizás sea posible hablar de obras weird que se encuentran en un estado más “puro” que otras. El propio Lovecraft consideraba algunas producciones de sus contemporáneos superficialmente weird, con ciertas deficiencias que solían estar ligadas a sus finales o a la relevancia dada al ser humano. Es así como la evolución de este término resulta ser tan extensible: hacia atrás y en adelante, el weird sostiene una puja con otras categorías tradicionales que, en primera instancia, parecerían no ser capaces de agotar las producciones que designan. Algunas de ellas: el tradicional relato de fantasmas, ciertas obras góticas inclinadas hacia lo sobrenatural, y la ciencia ficción, con un recorrido cronológico a la par del weird. Una de las confusiones principales, por ejemplo, suele darse con la literatura de horror. En su caso, se designa cierto tipo de literatura que por lo general está orientada a producir un efecto de pavor mental o psicológico. El weird se diferencia de esto en su carácter restrictivo: si bien los efectos son un requisito –a fin de cuentas, todo se pone al servicio de ellos–, está constituido por condiciones específicas. La principal y más representativa es la existencia de cierto elemento que desafíe las leyes naturales, cuando en la literatura de horror pueden tratarse temáticas que produzcan estos efectos desde una dimensión más cercana a la realidad. En resumen, el relato weird está en constante sintonía con el horror, pero no todo relato de este tipo es necesariamente weird.

Es importante, también, distinguir entre obras antes y después de Lovecraft, quien funciona como punto articulador para la historia del weird. Este destaca en sus ensayos a seis autores que desarrollan y establecen con maestría su tradición, sin perder el estilo propio. Claro está, debemos incluirlo a él mismo, quizás la personalidad con mayor influencia con respecto a su sistematización. Sin embargo, previamente –y en simultáneo– a la obra de Lovecraft, autores como Algernon Blackwood, Lord Dunsany, Arthur Machen, M. R. James, Walter de la Mare y Ambrose Bierce 3 hicieron su aporte para la gestación del weird, cuando todavía no podía considerarse autoconsciente. Por otro lado podemos encontrar un amplio número de escritores –sobre todo en el ambiente pulp– quienes forman el “círculo lovecraftiano” y mantienen el legado de su visión literaria: August Derleth, Fritz Leiber, Frank Belknap Long, Robert Bloch, Robert E. Howard y Donald Wandrei, entre otros. Todos ellos, con publicaciones en Weird Tales, a partir de una correspondencia constante, o –en el caso de Derleth y Wandrei– la preservación de la obra de su maestro, aportan en la formación de un weird autónomo y autoconsciente, aún con sus múltiples problemas y entrecruces con otros tipos de literatura.
Thomas Schonfeld (UBA)
Bibliografía
Burello, Marcelo. «H. P. Lovecraft: una poética de la weird fiction» en Horror y ficción. Ed. y Trad. por Marcelo G. Burello y Ramiro Vilar. Buenos Aires: Prometeo, 2013.
Joshi, S. T. «Introduction» en The Weird Tale. Seattle: Sarnath Press, 2017. [Esp. «Introducción» en El relato de ficción extraña].
– – – – – – . The Advance of the Weird Tale. Seattle: Sarnath Press, 2020. [Esp. El progreso del relato de ficción extraña].
Lovecraft, H. P. «Supernatural Horror in Literature», «Notes on Writing Weird Fiction», «Notes on Writing Interplanetary Fiction» y «Notes on Weird Fiction» en Collected Essays Vol. II: Literary Criticism. Ed. S. T. Joshi. Nueva York: Hippocampus Press, 2004. [Esp. «El horror sobrentural en la literatura», «Notas sobre la escritura de ficción extraña», «Notas sobre la escritura de ficción interplanetaria», «Notas sobre la ficción extraña» en Ensayos recogidos Vol. II: Crítica literaria].
Lecturas
H. P. Lovecraft. «The Colour Out of Space» (1927), «The Call of Cthulhu» (1928), The Whisperer in Darkness (1931), The Shadow over Innsmouth (1936), At the Mountains of Madness (1936), The Shadow out of Time (1936). [Esp. «El color que cayó del cielo», «La llamada de Cthulhu», El que susurra en las tinieblas, La sombra sobre Innsmouth, En las montañas de la locura, La sombra más allá del tiempo].
Arthur Machen. The Great God Pan (1890; 1894), «The White People» (1906). [Esp. El gran dios Pan, «La gente blanca»].
Algernon Blackwood. «The Willows» (1907), The Wendigo (1910). [«Los sauces», El Wendigo].
Lord Dunsany. A Dreamer’s Tales (1910). [Esp. Cuentos de un soñador].
Ambrose Bierce. Can Such Things Be? (1893). [Esp. ¿Pueden suceder tales cosas?].
- Traducción recuperada de Horror y ficción (2013), por Marcelo G. Burello y Ramiro Vilar. En el prólogo a este compendio de los ensayos lovecraftianos más representativos, señalan la imposibilidad de traducir satisfactoriamente una categoría tan escurridiza como la del weird, en los términos a los que Lovecraft refiere. Reponemos algunas aclaraciones: no es lo «extraño» en cuanto a un sentimiento de vaguedad, ni se solapa con la definición del cuento extraño realizada por Todorov en su clásica Introducción a la literatura fantástica (1970). En cambio, el weird debe considerarse, en estos casos, dentro del contexto en que intentamos trabajarlo. ↩
- El declive de las revistas pulp (llamadas así por el material con el que se producían y consideradas, por lo general, como un tipo de literatura «baja» y popular) se da a mediados de siglo y esta revista no es la excepción. Después, es posible rastrear algunos vanos intentos en revivir la revista desde los 80’ en adelante, destacando a uno de los actuales críticos del weird, Darrel Schweitzer, quién se desempeñó como su editor entre 1988 a 2007. Desde 2019, se está trabajando para retomar Weird Tales, con Jonathan Maberry encabezando el proyecto editorial. ↩
- Puede consultarse «El horror sobrenatural en la literatura» de Lovecraft, y en mayor profundidad los ensayos de S. T. Joshi para recuperar el análisis de las obras weird de estos autores. Reponemos, al final de la entrada, los títulos más representativos a modo de índice. ↩
Interesante articulo, me abrió un paisaje nuevo dentro de la literatura.
¡Muchas gracias por tus palabras, Rodolfo! Nos alegra que te haya sido de utilidad. Pronto subiremos más material sobre H. P. Lovecraft, y autores weird en general.